Las frutas y hortalizas frescas
forman parte de una buena dieta, pues son un gran aporte para el alimento. La
variedad y sabor satisfacen ciertas necesidades nutricionales. Su máxima
calidad de estos alimentos es cuando son cosechadas. Después de esto su calidad
se puede mantener o deteriorar durante su manejo y almacenamiento. De tal
manera el control de etileno es sumamente fundamental.
Para los productores de frutas y
hortalizas, mantener la calidad del cultivo después de la cosecha es de gran
importancia, pues según su calidad se puede vender a un mejor precio y un
producto de mejor calidad nos beneficia a nosotros. Pero, ¿qué es el etileno?
Este gas incoloro que es
producido de forma natural por las plantas que tienen la función de regular el
crecimiento. El comportamiento del etileno es igual que las hormonas en los
mamíferos, y durante el proceso de maduración desencadenan eventos específicos.
Mediante este efecto, el etileno
induce cambios en algunos órganos vegetales, los cuales se ven en la textura,
en la variación de color y degradación del tejido. Estos cambios pueden ser
favorables en la maduración y en otros, si no se aplica bien, pueden producir
daños o deterioro prematuro.
Un estudio realizado por el Dr.
R.B.H. Wills indica que la mayoría de productos frescos que siguen madurando
una vez separados de la planta (no-climatéricos), se mantienen con un nivel de
etileno que provoca pérdida entre el 10 y 30% después de su cosecha. Por ello
se llegó a las conclusiones de la importancia que tiene un buen control de
etileno en toda la cadena de distribución.
- Los niveles de etileno que están en los mercados
mayoristas provocan una pequeña reducción de la calidad después de la
cosecha, por otro lado, los niveles que se encuentran en los centros de
distribución producen reducciones moderadas. En los supermercados los
niveles de etileno son más sanos.
- Un buen control de etileno, aumentará la vida
comercializable de las frutas y verduras, produciendo una mayor confianza
en el consumidor, que se verá traducida en un aumento de precios y ventas.
- Es importante saber que las flores, las frutas y
hortalizas cosechadas de plantas diferentes tienen distintas tasas
respiración diferente, lo cual hace que la exposición a una misma cantidad
de etileno dentro de un almacenaje afecte más a uno que a otros.
- La cantidad de aire de etileno en las distintas
fases de la post cosecha, llega a impactar del tal forma en el estado de
conservación del producto, y esto es fundamental en toda la etapa de la
cadena de distribución.
Por tal motivo facilitar
información de cómo realizar un almacenamiento, mediante el uso correcto del
etileno es una buena y favorable oportunidad para evitar desperdicios.
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